domingo, 23 de mayo de 2010

Ronnie James Dio - Hasta la próxima.


Over and Over

Sometimes I feel like I'm dying at dawn

And sometimes I'm warm as fire

But lately I feel like I'm just gonna rain

And it goes over, and over, and over again, yeah

Too many flames, with too much to burn

And life's only made of paper

Oh, how I need to be free of this pain

But it goes over, and over, and over, and over again

Yeah, sometimes I cry for the lost and alone

And for their dreams that will all be ashes

But lately I feel like I'm just gonna rain

And it goes over, and over, and over, and over again

Eran las tres de la tarde de ese domingo 8 de noviembre de 1992 y la angustia nos hacía pedazos, pues mientras el personal del hotel nos invitaba a pasar para esperar placidamente en el lobby, los roadies de Black Sabbath parecían corrernos con sus jetas y malos modos.

Se hacía tarde y aún teníamos que atravesar la ciudad para recoger los boletos del concierto de esa noche. Ahí nos encontrábamos mi hermano el Estrellas Mañanitas, Rafita, El Tío (a quien habíamos conocido hacía apenas unas cuantas horas), su servidor el Diablo y creo que dos gueyes más. Y ya desesperados porque ahí no sucedía nada y por la larga travesía que nos esperaba, habíamos decidido retirarnos y así lo anunciamos. Y fue entonces que los dos gueyes nos pidieron aguantarlos, mientras salían a buscar una cabina telefónica.

Era 1983 cuando en medio de nuestra acostumbrada pobre oferta radiofónica (a pesar de que sí había varias estaciones que dedicaban su tiempo aire al rock), Victor Manuel Luján (reconocido crooner grupero del bajío en estos días), anunciaba en WFM (96.9), “Rainbow in the dark”, el sencillo del disco debut de Dio. Esta era la banda de Ronnie James Dio, el ex - vocalista de Black Sabbath. Así que bajo este dato nos pusimos a investigar (no existía el Internet chavos), y buscar material del famoso ex –vocalista de los Black Sabbath esos. Es así como llegó a mis manos “Holy Diver”.


A los pocos minutos, los dos gueyes regresaron corriendo al hotel, pálidos y sin poder articular palabra alguna. Unos segundos después solo balbucearon: “…ahí están”. Para entonces los demás estábamos a su alrededor y en eso se hizo la luz. Por la puerta principal del hotel entró caminando una pequeña figura, familiar para nosotros gracias a miles de fotografías de las revistas y a los videos que para entonces teníamos perfectamente memorizados. En ese momento Ronnie James Dio llegó y se paró en el centro del círculo que habíamos formado. Sigilosamente nos miró y fue a pararse frente al Estrellas Mañanitas, quien sostenía con sus manos temblorosas un chingo de portadas de discos. Dio descolgó de su hombro una maleta y se la entregó a su asistente, entonces retiró los discos de las manos de mi hermano y los comenzó a autografiar. Nadie de nosotros podía hablar y nos temblaban las piernas.

Casi al mismo tiempo que “Holy Diver” comenzaba a direccionar mi vida, también llegó a nosotros el soundtrack de la película de animación “Heavy Metal”. En él se incluía el tema “Mob Rules” de Black Sabbath, la cual me motivó a adquirir precisamente el disco del mismo nombre. De tal forma ese primer contacto con Black Sabbath a través de “Mob Rules”, fungió como pasaporte hacia el lado más oscuro y espeso del rock. Para entonces mi atención era para Iron Maiden, Scorpions y Judas Priest, bandas a las que de ninguna manera quiero sobajar. Sin embargo escuchar “The Sign Of The Southern Cross” y “Falling Off The Edge Of The World”, me transmitían información muy diferente a la que obtenía de cualquier disco completo de las bandas mencionadas. Black Sabbath me hablaba en otro idioma y no bromeaba, su rock en definitiva me parecía más demandante que cualquier otra cosa. Me hacía sentir en un mundo para adultos y me daba la impresión de estar pisando por terrenos de real peligro. La guitarra, el bajo, la batería y la voz… esa voz, eran cuatro amenazantes monstruos que cabalgaban a través de las bocinas y en la oscuridad.





De la manera más amable y siempre sonriendo, Dio firmó todos los discos y nos pedía que nos tranquilizáramos. Mientras esto sucedía, Tony Iommi, Vinny Appice y Geoff Nichols se acercaron al mostrador para registrarse. Cautelosamente esperé a sus espaldas y cuando Iommi volteó hacia mí, comencé a temblar de nuevo supongo de una forma muy graciosa, pues mientras al amo de los riffs sonreía y trataba de tranquilizarme, Vinny se dejaba caer en un sillón carcajeándose de mi numerito. Todos nos atendieron de maravilla, a excepción de Geezer Butler quien huyó al elevador, evitando cualquier convivencia. Por la noche las tinieblas se apoderaron del Palacio de los Deportes y nunca más la sobada frase se emplearía más acertadamente. Black Sabbath realizó una de sus últimas presentaciones con Dio al frente, pues tan unos días después Ozzy Osbourne se convertiría en la manzana de la discordia. El concierto comenzaría con “E5150”, “Mob Rules” y “Computer God”, permitiendo que durante esta primera pausa Dio se arrodillara a la orilla del escenario para saludar al pequeño Diablo y su hermano. Ese no había sido un pacto firmado con sangre, definitivamente lo hizo con algo más indeleble.

En adelante, la relación con Dio fue más allá que la de cualquier otro ídolo musical con sus seguidores. Por alguna razón la influencia de aquella minúscula figura, llegaba más allá en la vida de sus seguidores y los testimonios que durante estos días han poblado la red informática, nos indican sin duda que nos encontramos ante una persona excepcional, amén de su calidad como músico. La convivencia personal se dio en diversas ocasiones más y con ello, además de atestiguar lo autentico de su personalidad, nos quedo claro que Dio jamás olvidaba.




La muerte de Ronnie James Dio ha sido para el mundo del rock pesado una pérdida irreparable y sin duda ha dividido su historia en dos; antes y después de Dio. Y a la par de su legado musical, se lamenta la pérdida de uno de los personajes más queridos en el mundo musical.

Dio nos bendijo con la noche y nos guió por el valle de las brujas. De igual forma nos aconsejó a no confiar de nuestra sombra en la oscuridad y nos dio la información para elegir entre el cielo y el infierno. Mucha metáfora para el ajeno? Pero toda la verdad para el iniciado.




Ronnie James Dio, el Diablo te saluda y agradece por tanta diversión. Definitivamente la vida hubiera sido bien diferente sin tu participación. Sabemos que solo estarás preparando el escenario para la siguiente etapa.




We rock!









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Nota: Dificilmente el Diablo comparte material tan íntimo, pero en esta ocasión es un honor. Las fotos usadas para este post las tomó durante esa mágica noche en el Palacio de los Deportes.






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6 comentarios:

Irving dijo...

SSSSSSSSSSSSSS!!!!!!!!!!!!! Felicidades por esos momentos cabron!!!

Solo dos personas se pueden burlar del Diablo... El pequeño Joaquin y Vinny Appice jajajajajajaja!!!!!

Kharlos dijo...

EXCELENTES FOTOS!!

Tuve también la suerte de convivir con él, y tengo como recuerdo un video que acabo de ver esta semana, después de la noticia.

No tengo que explicarte lo que pasó después de verlo, pero te lo comparto Master, te lo estaré enviando este Domingo.

Gracias por Compartir con todos estas Maravillosas Fotografías!!!

Metallian dijo...

Que envidia. Y tú todavía con pelo y sin canas :) ...

Bun)s( dijo...

que chingona anecdota bro!

acá andare por este blog tan chido =D

squeezit the moocher dijo...

Oh diablo nuestro! He de decirte que ha sido muy elocuente ese magnífico Over And Over bajo título de nuestro Dio... Siempre, desde el primer día he pensado que Ese es mi tema preferido de Black Sabbath Mark II, y me encanta que intuyo para ti también lo es... Lo pongo siempre que puedo, es un tema perfecto y emotivo además de un Iommi sobrado para crear solos que ponen los pelos de punta; creo que Ozzy tenía razón cuando decía que Iommi es el guitarrista más (auto)subestimado en la faz de la tierra, cuando en verdad debería estar a la altura de los dioses si no más alto. No me creo cuando dice que no sabe crear solos, y que son puro espontáneos según le venga el lapsus de oportuna razón... Pues, escuchando solo lo que ha hecho en éste Tema Legendario no se corresponde con lo dicho; en todo caso, sus palabras lo terminarán por enaltecer más, porque pocas veces se ven sentimientos tan verdaderos y nada pretenciosos.

Quiero decirte además que cuando escuché Black Sabbath por primera vez y desde entonces se me activó mi Zona Muerta (va por Cronenberg, jajajajaja) me sentí como un bicho raro que no tenía a nadie que los conociera ni mucho menos los entendiera como los sentí yo... Tan solo Agradecerte que con tus palabras y entusiasmo mantengas viva la esencia de nuestros mejores recuerdos, no sólo para mí, sino para todo el mundo que se sienta identificado y ahora sé que los hay Por Infinitos. Cuando se habla de Sabbath no hay término medio, o los Idolatras hasta el fin de los tiempos o los ignoras, y qué pena me da que haya quien no sepa verlos y disfrutarlos. Es por ello que nunca morirán, son pilar de pilares a la altura de nuestros sueños, y los sueños son eternos!

Alexey dijo...

Mi estimado, que foto, realmente me soprendiste, nunca imaginé que tuvieras una foto con DIO y de 1992, año en el que una vez te comenté que estuve en décima fila, y que quedé extasiado, pasmado, asombrado, fascinado, y muy agradecido después de salir de ese concierto.
8 de noviembre de 1992, Palacio de los Deportes, y aun conservo mi boleto, creo con el precio de 130,000 pesos de esa época; pero nunca como tu obtuve una fotografía con DIO o al menor lograr estar cerca como tu estuviste; y vaya que luces muy diferente sin canas en esa foto.
Saludos, esperemos que ya no haya más sorpresas desagradables como esta en este año, pero desafortunadamente muchos de los íconos del rock, ya pasan de los 60 años y eso ya es riesgoso, considerando su prefesión de rockanroleros (excepto Lora, que es un advenedizo).
Long Live Black Sabbath.....
Alex
P.D. Nos vemos en el chopo un sábado de estos.